Las elecciones generales de Irlanda del Norte de 1969 se celebraron el 24 de febrero de 1969, con una nueva e incontestable victoria del Partido Unionista del Úlster (PUU) de Terence O'Neill; y, por primera vez los unionistas se presentaron divididos. Asimismo, el movimiento de los católicos irlandeses a favor de los derechos civiles comenzaba a tomar cuerpo y provocará los primeros disturbios y la dimisión de O'Neill.